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Polémica en Santa Fe por los grupos de vecinos que sacan sillas a la calle para tomar el fresco

Un mensaje de la Policía Local recordando las ordenanzas y pidiendo respeto ha desatado el debate en redes.

El Ayuntamiento aclara que el mensaje va dirigido a quienes usan la excusa de salir a tomar el aire para cortar las calles, montar barbacoas, cantar o tocar la guitarra. 

CANAL SUR MEDIA 5 junio 2025

Cuando llegan las noches calurosas los habitantes de muchos pueblos de Andalucía suelen sacar sus sillas a la calle para refrescarse y charlar con sus vecinos. Pero en Santa Fe (Granada) un mensaje de la Policía Local sobre la ordenanza que regula el uso de la vía pública ha abierto un curioso debate, fuera y dentro de las redes sociales.

Caen los últimos rayos de sol y llega la hora de descorrer cortinas y salir a la calle. Una costumbre que se repite desde hace generaciones, con tertulias improvisadas que no tienen ni obligaciones ni reglas. 

Pero la Policía Local de esta localidad granadina ha recordado que en la calle la convivencia está regulada por ordenanzas, y eso ha encendido las redes sociales y ha abierto un debate que ha tenido eco en toda España.

El pasado 27 de mayo el cuerpo de seguridad publicaba un tuit que ha desatado la polémica al sugerir que algo tan granadino y andaluz como salir a la puerta de la casa con una silla a tomar la fresca en verano estaba prohibido.

No es así, explican desde el Ayuntamiento de Santa Fe, que aclara que no hay ninguna prohibición en salir a la calle y el tema también se ha convertido en el trending topic de portales y zaguanes. Porque estas improvisadas tertulias se abren hasta para los que pasan en coche.

Así, ha aclarado el verdadero sentido del mensaje de la Policía Local, que "está destinado a aquellas personas que, cometiendo actos incívicos, utilizan la excusa de salir a tomar el aire para cortar las calles, montar barbacoas, cantar o tocar la guitarra". Reuniones ruidosas a altas horas de la noche que se han convertido en un problema por el que tanto los agentes de seguridad como el alcalde reciben quejas y llamadas de forma reiterada a la entrada del periodo estival.

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