Una grabación de Koldo García sobre el cobro de comisiones motivó el registro de la casa de Ábalos

Casi diez horas ha durado el registro de la vivienda en Valencia del exministro de Transportes y exnúmero dos del PSOE, José Luis Ábalos. Los agentes de la UCO, la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, le han clonado el móvil y se han llevado varios dispositivos electrónicos y documentación. El juez del Tribunal Supremo que ha ordenado el registro investiga, en una pieza separada del caso Koldo, el supuesto cobro de comisiones ilegales por la adjudicación de contratos públicos de obras. También ha habido registros en Granada, en una constructora de Pamplona y en Vizcaya. El propio Ábalos ha contado, en la puerta de su domicilio, que le han clonado el móvil y se han llevado dos memorias extraibles tamaño petaca y dos discos duros externos.

El magistrado del Tribunal Supremo (TS) Leopoldo Puente ordenó a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que registrara el domicilio que el exministro de Transportes José Luis Ábalos tiene en Valencia a raíz de unas grabaciones halladas en el móvil del que fuera su asesor ministerial, Koldo García, en las que el ex dirigente socialista reconocería haber recibido un "beneficio económico" a cambio de adjudicaciones de obra pública.

La Guardia Civil ha realizado un minucioso registro que se ha realizado incluso “libro por libro”. Han buscado documentos e incluso dinero en efectivo. Cualquier cosa que pudiera probar la adjudicación de contratos de obra pública a cambio de mordidas. Todo saltó a raíz de la confesión del empresario Víctor de Aldama en el Tribunal Supremo. Implicó a Ábalos y otros altos cargos del Gobierno y del PSOE. Aldama también llegó a presentar una nota manuscrita por Koldo García -ex asesor de Ábalos- con la lista de adjudicaciones que presuntamente fueron amañadas. Una prueba caligráfica ratificó que Koldo era el autor de esas anotaciones. Y todos los contratos corresponderían al Ministerio de Transportes en la época en que estuvo al frente José Luis Ábalos. Además de su domicilio, también se han registrado las sedes de varias constructoras.

El exministro de Transportes José Luis Ábalos se ha mostrado tranquilo. "Lo único que les interesaba era el teléfono", ha dicho para aclarar que no estaba preocupado porque, "más allá de las cosas íntimas", que ha confiado en que se preserven, su móvil "no registra una gran actividad desde hace mucho tiempo". "Por lo tanto, todo lo que sea aclarar no me molesta, así es que estoy muy bien", ha sostenido. Interrogado sobre los motivos del registro, el exministro de Transportes ha precisado que guardan relación con un reciente informe fechado el 5 de junio. La UCO buscaba documentación relacionada con obra civil, en base a los papeles aportados por el presunto conseguidor del 'caso Koldo', el empresario Víctor de Aldama, sobre supuestos amaños en la adjudicación.

Ábalos, que en sucesivos escritos ante el TS e incluso en una denuncia ante la Fiscalía ha acusado a la UCO de llevar a cabo pesquisas ilegales en su contra, ha contado que "ha sido la propia Guardia Civil" quien le ha llamado este martes para pedirle que "bajara a abrirles" y que "el trato ha sido excelente", con una intervención "mínima" y "muy profesional", mientras que por su parte ha hablado de "absoluta colaboración".mSi han tardado tanto en efectuar el registro, que se ha prolongado desde las 7.00 hasta las 16.30 horas aproximadamente, ha sido porque tiene "muchos libros" y revisarlo todo "da mucha faena". "No es que los hayan visto todos, pero sí por encima. Y luego, en el bajo, pues tengo mucho trasto, muchas cajas", ha precisado a preguntas de los periodistas.

Ábalos ha aprovechado para reiterar que en la causa que el magistrado del TS Leopoldo Puente sigue en su contra por el presunto cobro de comisiones en efectivo y especie a cambio de la adjudicación de contratos de obra pública y para la compra de material sanitario en plena pandemia de coronavirus, "hay más sospechas que indicios". "Yo he defendido mi inocencia y la voy a seguir defendiendo hasta el final", ha reiterado. Así, aunque ha confiado en que "esta pesadilla algún día termine", ha lamentado que ya tiene "la condena social, el juicio paralelo y la reputación destrozada", a lo que ha sumado otras "muchas vidas destrozadas".

En este sentido, ha llamado a una "reflexión" sobre lo que implica "deshumanizar a las personas de tal modo que todo lo que pueda proyectarse sobre ella sea creíble porque ya moralmente se le ha desprovisto de todo". "Y en mi caso no han sido solo esas cosas. Han sido los bulos, las mentiras, para ir generando la imagen de una persona abyecta donde a partir de ahí todo te lo puedes creer porque moralmente es reprochable como persona", ha denunciado.

En la misma línea ha señalado que, incluso con el procedimiento judicial concluido, ya "casi todo será irreparable". "Por lo menos, podré hacer un plan de vida en el tiempo que me quede", ha dicho.