Viviendo en Atlanta en 1880, el farmacéutico norteamericano John Pemberton vendió un jarabe hecho de vino y extracto de coca bajo el nombre de “Vino francés de coca de Pemberton”, el cual se usaba como una cura para dolores de cabeza y desórdenes nerviosos. En 1885, Atlanta prohibió la venta de alcohol, así que Pemberton creó una versión basada puramente en la coca del jarabe mezclada con agua carbonatada y bebida como refresco. El resultado fue una gaseosa perfecta para la era de la templanza, un “tónico cerebral” llamado Coca Cola.