Guardia Civil de Tráfico, la especialidad con más riesgo
Desde que se creó la unidad en 1959, 345 agentes han perdido la vida en acto de servicio
10.000 agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil se despliegan por la red de carreteras de todo el país. Su misión, vigilar que se cumpla la ley, pero no es fácil y lo demuestra que es la especialidad con más fallecidos de todo el cuerpo, 345 desde que comenzó, en 1959, por distintas causas, entre ellas los atropellos.
Atropellado murió el agente de Jaén Dámaso Guillén, que fue arrollado por un conductor a la fuga mientras custodiaba una prueba ciclista en Pravia. Su actuación , al interponerse entre el coche y los deportistas, evitó una masacre.
En el recuerdo quedan también los 12 agentes de la academia de Baeza que murieron al explotar un coche bomba de ETA en la madrileña Plaza de la República Dominicana. O los guardias Juan Antonio Palmero y José Antonio Vidal, asesinados a tiros en 2004 por el atracador de bancos conocido como El solitario. Pero la mayoría ha muerto trabajando en la carretera.
