El hallazgo, publicado en la revista Nature, ha permitido detectar en la corteza cerebral un grupo de neuronas denominadas “de progreso hacia el objetivo”. Estas células no se activan en función del lugar en el que se encuentra el animal, como ocurre con las conocidas place cells del hipocampo, sino con relación al avance dentro de una secuencia conductual. Es decir, el cerebro no solo mapea el espacio físico, sino también el desarrollo de una tarea.