Este nuevo organismo unicelular fue identificado durante el análisis del genoma del plancton Citharistes regius, en cuyos datos se detectó una secuencia de ADN completamente desconocida. Los investigadores determinaron que pertenecía al dominio Archaea, grupo que engloba a algunos de los seres más antiguos de la Tierra y del que derivan las células complejas actuales.
El hallazgo ha sido recogido en un artículo preliminar publicado en la plataforma científica bioRxiv, donde se describe su genoma como "profundamente simplificado" y centrado únicamente en las funciones básicas de replicación, transcripción y traducción. Esta configuración genética supone un nivel de dependencia nunca antes observado en otros miembros del dominio Archaea.