En un pleno de alto voltaje político, el presidente del Gobierno ha asegurado que la renuncia sería la solución "más sencilla" para él y su familia, pero que tras reflexionar decidió seguir adelante.
Sánchez ha reconocido su "profunda decepción" y su "error" confiado en Cerdán y Ábalos. El presidente se jugaba la Legislatura y ha pedido otro voto de confianza a sus socios, con un paquete de 15 medidas contra la corrupción.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha admitido que barajó en su momento dimitir y convocar elecciones por el caso Koldo porque parecía la solución "más sencilla" para él y su familia, pero que tras reflexionar, decidió "no tirar la toalla" y seguir adelante. En su comparecencia monográfica por corrupción ante el pleno del Congreso, Sánchez ha reconocido que estudió todas las opciones para dar salida a la crisis abierta por el supuesto caso de corrupción del exsecretario de Organización socialista Santos Cerdán, pero ha subrayado que seguirá porque es un "político limpio" y pretende "defender la integridad" del que ha destacado que es un "partido ejemplar".
Sánchez, que ha recibido un gran aplauso de la bancada socialista al subir a la tribuna antes de tomar la palabra, se ha dirigido a los grupos parlamentarios que apoyan al Gobierno y a la ciudadanía para asegurar que, aunque comprende las dudas de los ciudadanos, no tenía conocimiento de las "corruptelas" de Cerdán y del exministro José Luis Ábalos. Ha reconocido su "profunda decepción" y su error de haber depositado en ellos su confianza y, tras admitir que la dimisión y la convocatoria electoral han estado entre las opciones que ha barajado, ha argumentado que va a seguir al frente del Gobierno hasta 2027, cuando tocan las elecciones generales, porque pretende "recuperar la confianza" de los grupos parlamentarios que apoyaron su investidura.
"Voy a estar a la altura, voy a satisfacer sus expectativas de regeneración y con los compromisos que adquirí con ellos", ha enfatizado. Por último, ha añadido un tercer motivo por el que no tirar la toalla: "El proyecto político que represento desde hace siete años va mucho más allá de mi persona y aún no está terminado".
En el siguiente vídeo puedes ver la historia de esa decepción en palabras del propio Sánchez.
Después de lanzar una batería de medidas anticorrupción durante su primera intervención, Sánchez ha pasado al ataque en la réplica defendiendo la limpieza de su Ejecutivo y cargando contra la corrupción del PP y también durante la administración de Felipe González, que mantiene una posición crítica hacia él y se ha mostrado partidario de un adelanto electoral para superar la crisis actual. En la réplica, el presidente ha defendido que su Gobierno es "el más limpio de la democracia junto al del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero", frente a la corrupción de los periodos del también socialista Felipe González y de los gobiernos del PP de José María Aznar y Mariano Rajoy.
MEDIDAS CONTRA LA CORRUPCIÓN
Sánchez ha anunciado un paquete de 15 medidas anticorrupción, entre las cuales están el aumento de condenas para este tipo de delitos, duplicar el tiempo de prescripción y crear listas negras de empresas condenadas para que no puedan contratar con la administración pública. Sánchez ha adelantado que pretende crear una agencia anticorrupción independiente y también una reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (Lecrim) para proteger aún más a los informantes que denuncien delitos de corrupción.
El jefe del Ejecutivo ha señalado que este paquete de medidas se ha elaborado en el último mes, con la ayuda del socio de coalición Sumar, y de los técnicos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). En la misma línea, ha anunciado la creación de nuevas secciones de delitos contra la administración pública con "jueces especializados" y además creará procedimientos sumarios para causas que involucren a cargos públicos para evitar dilaciones que "merman la confianza" de los ciudadanos.
RECUERDO AL FALLECIDO PADRE DE YOLANDA DÍAZ
El presidente inició su comparecencia en el pleno del Congreso al sindicalista Suso Díaz, padre de la vicepresidenta segunda del Ejecutivo, Yolanda Díaz, fallecido el martes. "Quiero que mis primeras palabras sean de recuerdo y de reconocimiento a un sindicalista, a un galleguista, a una persona profundamente de izquierdas, a Suso Díaz. Todo nuestro recuerdo y todo nuestro reconocimiento para la familia De Suso Díaz y para Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno", ha dicho.
Díaz no ha podido contener las lágrimas al escuchar estas palabras sentada no en la bancada azul del Gobierno, como suele hacer habitualmente en los plenos, sino en los escaños de Sumar junto a la portavoz de su grupo parlamentario, Verónica Martínez Barbero, que la ha abrazado para consolarla.
Pese al fallecimiento de su padre, Díaz ha mantenido su presencia en el pleno y responderá a Sánchez en nombre de su Sumar tras su comparecencia en el pleno para hablar de los casos de corrupción que afectan al PSOE y al Gobierno, como estaba previsto.